La família ¿Addams?... ¿Monster?... ¡Collins!
El universo creado por Tim Burton a lo largo de sus 16 largometrajes ya ha dejado de ser innovador y extraño para el público. Quién más quién menos está familiarizado con sus mundos oscuros de aire gótico, lo cual hace que cualquier película que estrene resulte reconocible y fácilmente identificable por su estética. Aunque la mayoría de ellas se sustentan en esa estética también gozan de grandes interpretaciones, historias de peso, tramas interesantes, música envolvente del siempre acertado Danny Elfman, un sentido del humor bastante irreverente y una atmósfera raruna de cuento de brujas.
SOMBRAS TENEBROSAS (Dark Shadows en su versión original), tiene algo de todo esto, pero se aleja bastante, en cuanto a calidad, de sus obras más logradas como la mágica EDUARDO MANOSTIJERAS, sus particulares aproximaciones al mundo de Bruce Wayne en BATMAN y BATMAN VUELVE, la emotiva y bella BIG FISH o el curioso biopic del peor cineasta del mundo ED WOOD.
Basándose en una serie de éxito de la televisión americana de los años 60 y principios de los 70, Burton ha realizado, de nuevo, una historia para lucimiento de su actor fetiche Johnny Depp. Este se enfunda en la blanquecina piel y los afilados colmillos del vampiro Barnabas Collins (personaje que, curiosamente, no aparecía en la serie televisiva hasta el capítulo 210) quien, maldecido por la bruja Angelique (Eva Green) ha pasado los últimos dos siglos enterrado y vuelve en plena década de los 70 para recuperar el tiempo perdido. En su impresionante mansión viven los últimos Collins, una familia a la que persigue la maldición de Angelique, aún viva, la cual les ha arrebatado su poder económico y social. Barnabas está dispuesto a devolver a su familia el poder y el estatus que les pertenece.
Me da la sensación que Burton ha querido contar demasiadas cosas (por otra parte lógico, ya que comprime en un par de horas cientos de capítulos) dejando de lado a la mayoría de secundarios, que en algunos casos no son más que figurantes con frase. Así Jackie Earle Haley está muy desaprovechado. Un actor de tal categoría y que, además, cuenta con un personaje que a priori resulta bastante interesante debería tener más peso aunque esto represente dejar un poco de lado a Depp. Al contrario, a Jonny Lee Miller se lo podrían haber ahorrado pues su personaje no aporta nada a la historia y se pasea por los platós como alma en pena.
Como ya he comentado, Burton cuida mucho la estética de sus películas y esta no podía ser menos. El maquillaje, la peluquería, la dirección artística, el vestuario, los efectos visuales están más que correctos. Pero a veces descuida detalles como cuando Barnabas se quema por los rayos del sol entrando en contacto con su piel, y en cambio un par de secuencias después lo vemos paseando por unos acantilados con su enamorada bajo un espléndido sol sin que sufra ningún desperfecto. No se yo si unas gafas de sol y un paraguas son suficientes para evitar quemaduras en la sensible piel de un vampiro.
La historia que nos cuentan, bañada de bastante humor, no resulta todo lo interesante que podría. No me ha disgustado del todo, pero creo que parece un capítulo piloto de una serie de televisión con cierto olor a naftalina y tono viejuno.
VALORACIÓN: